Para generar las bases del proyecto de saneamiento de Las Salinas, ingresado al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental (SEIA) en el año 2017, se formó un (CES), integrado por Las Salinas y expertos locales, representantes de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso y de la Universidad Técnica Federico Santa María.
Fruto del trabajo realizado por este equipo de profesionales, emerge el (PGI), como marco fundacional del proyecto de saneamiento para Las Salinas y también como propuesta general para la recuperación de suelos en entornos urbanos en el país.
Es así como, más allá de la biorremediación como técnica ampliamente utilizada en el mundo, se propusieron como meta responder una pregunta que apunta a la epistemología del proyecto, es decir, el concepto que la dirige y sustenta: La respuesta se basa en una Con estos aspectos en mente se busca acreditar estándares de diseño, operación y gestión de excelencia, con el fin de transformarse a corto plazo en un proyecto de referencia a nivel regional y nacional.
Tal y como señala, Salvador Donghi, integrante del Comité Científico: “”.
En este sentido, no basta sólo con desarrollar una propuesta que permita levantar la condición de riesgo que existe sobre el paño Las Salinas, en cumplimiento mínimo de la normativa ambiental. Debemos ser capaces de actuar de manera colaborativa en un proceso natural de remediación, a través de un enfoque que conjugue lo biogeográfico, lo social y lo urbano, en función de motivaciones relacionadas con la reciprocidad y el bien común.
El objetivo en el que se centra el es enfrentar el proceso de biorremediación situando a todos los participantes (expertos, empresas, vecinos, etc.) de forma simétrica y entendiendo cada uno de los componentes de los impactos que se puedan generar, incluidas las respuestas a la comunidad y el trabajo con ésta. Para Donghi, esta mirada más simétrica y sistémica “”.
